"Dentro del amplio arco de las fuerzas de izquierda, varias se verían afectadas con los nuevos requisitos del sistema electoral. El MST tiene 36.690 afiliados en todo el país, pero no podría competir en las elecciones nacionales porque sólo en Mendoza y provincia de Buenos Aires cumple con el cinco por mil que fija el proyecto del Gobierno.
Su líder, Vilma Ripoll, planteó como solución un reclamo histórico del progresismo. “En la hipótesis de que no se logre frenar la reforma política, nosotros vamos a replantear el desafío de la unidad política de la izquierda. No somos sellos de goma, tenemos historia. Incluso tenemos representación parlamentaria. ¿Por qué vamos a resignar la pelea político-electoral?”."
Después de la asignación universal, de la ley K de medios, etcétera etcétera, siguen los aportes del ejecutivo: lograr que la izquierda se una de una vez por todas.
¿Qué más revolucionario que conseguir la unión de estos mismos? Ah, si, me olvidaba: su conducción.
Bueno, todo no se puede.
En el bicentenario de la batalla de Ayacucho
Hace 12 horas
1 comentario:
jaja, muy bueno
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